viernes, 30 de junio de 2017

lunes, 3 de abril de 2017

El número de aplicaciones disponibles para descargar continúa creciendo. Los usuarios de Android pueden seleccionar entre 2,2 millones de aplicaciones, mientras que la App Store de Apple tiene 2 millones de aplicaciones, según el portal estadístico Statista.com.
Las aplicaciones agrícolas representan una porción relativamente reducida, pero todavía presentan una gran variedad de opciones. Una de las formas más comunes de descubrir una nueva aplicación es una recomendación de boca en boca. Otra es ir a explorar por su cuenta. A continuación se presentan diez aplicaciones nuevas o probadas con tiempo que pueden ayudarle a comenzar.
Todas son gratuitas y están disponibles en Google Play y en la App Store de Apple. Algunas incluyen versiones premium o compras en la aplicación.
  1. ID Weeds: Encontraste una maleza o mala hierba que no puedes identificar? Esta aplicación, popular entre los agricultores del Medio Oeste permite buscar malezas con un sistema de identificación fácil de usar. Puede identificar malezas basadas en una serie de características, incluyendo su hábitat, tipo de hoja, color de la flor, sistema de raíces y otras características.
  1. FarmLogs: Una aplicación gratuita disponible para gestionar el campo. Con la aplicación se puede correlacionar rápidamente los límites del campo y obtener información histórica y en tiempo real sobre cada campo, incluyendo datos de lluvia, mapas de suelos, mapas de rendimiento y estimaciones crecimiento, dice Shep Whitcomb, gerente de marketing de FarmLogs. “También puedes registrar y compartir notas de exploración, fotos y actividades del campo y controlar remotamente el crecimiento de la planta y el rendimiento del cultivo”, dice.
  1. AgMobile: Desarrollado en una colaboración entre AgriCharts y Successful Farming, la aplicación ofrece una variedad de información, incluyendo mercados de productos básicos, noticias y clima. Entre sus muchas características están las cotizaciones y gráficos locales de granos, noticias de última generación de agricultura, comentarios en vivo del mercado y análisis técnico. La actualización más reciente fue la adición de información de Grains.com, un mercado de AgriCharts para agricultores y compradores de granos.
  1. Cattle Market Mobile: Una manera rápida de ver los informes locales de subastas de ganado organizado por el estado, así como la información del mercado de ganado USDA. La sección “Herramientas Útiles” incluye una calculadora de terneros y una calculadora de gestación. Las actualizaciones de este año son la adición de cuatro nuevos informes de productos básicos del USDA.
  2. SoilWeb: La aplicación utiliza el GPS del teléfono para indicar el tipo de suelo en el que se encuentra y permitir explorar niveles profundos de información sobre suelos del USDA. La aplicación le da casi todo lo que necesita saber sobre el suelo del predio, incluyendo el tipo de suelo y la taxonomía, clasificación de la tierra, clasificación hidráulica y de inundaciones, materia orgánica y más.
  1. Tank Mix Calculator: La aplicación genera una mezcla de estanques rápida y fácilmente, según los desarrolladores de TapLogic. Introduce la superficie, el tamaño del tanque y el volumen, luego selecciona los productos químicos de una lista o crea los tuyos. A continuación, la aplicación muestra el número de cargas necesarias para pulverizar el campo. Las nuevas adiciones a la aplicación el año pasado incluyeron una lista química actualizada, ahora hasta 14,000 productos, así como cambios de formato y estilo.
  1. Wunderground: No es estrictamente una aplicación agrícola, pero que debe interesar a los agricultores entusiastas del clima, los que quieren datos meteorológicos más detallados en sus teléfonos, o que tienen sus propias estaciones meteorológicas. El servicio se distingue por su red de más de 180.000 estaciones meteorológicas personales (a las que puede unirse), proporcionando predicciones “hiper-locales”, radar, condiciones actuales y más. Los nuevos desarrollos se reportan frecuentemente en la página de los desarrolladores.
  1. Canopeo: Los desarrolladores de la Universidad Estatal de Oklahoma describen la aplicación como una “herramienta de medición rápida y precisa de la cubierta verde del dosel”. Cuantifica el porcentaje de cobertura de vegetación verde viva para sus cultivos y pastizales, lo que le ayuda a monitorear el progreso del cultivo y tomar decisiones de manejo informadas. Las nuevas características agregadas el otoño pasado incluyen una opción para cargar imágenes cuando la red wifi está disponible, así como una pantalla que muestra la ubicación geográfica de las imágenes en su cuenta.
  1. Bean Cam: Lanzada en enero de 2016, con actualizaciones desde entonces, la Wisconsin Soybean Replant Calculator utiliza el espectro de luz verde en su cámara de teléfono para estimar estándares de soja. “La aplicación Bean Cam se ha basado mucho en la suposición de las decisiones de replantación, dice Kyle Stull, un agrónomo de Wisconsin. “Una vez calibrado, obtendrá una población rápida y precisa junto con una estimación de rendimiento del lugar actual y una estimación de un lugar replantado”.
  1. GPS Area Measure: La aplicación calcula el área en un mapa, proporcionando información precisa de área, distancia, ángulo y volumen. Para usarlo con la pulverización, por ejemplo, puede registrar el área que se ha rociado, lo que le permite ver exactamente lo que se ha rociado y lo que no, dice Blake Bennett, un economista de Texas A & M. “Si dejas de pulverizar en el campo un día, la aplicación mostraría exactamente donde lo dejó al regresar al trabajo al día siguiente”

jueves, 19 de enero de 2017

El Nitrogeno en la tierra. El deseado elemento

Cada año, los seres vivos que habitan la Tierra fijan en el suelo 200 millones de toneladas de nitrógeno, elemento esencial para la vida en el planeta. Sin embargo, el proceso contrario, la liberación de nitrógeno a la atmósfera, se estima en 300 millones de toneladas. La cuenta sale en negativo para el suelo. Por eso, los agricultores llevan siglos buscando la manera de enriquecerlo con los fertilizantes que aporten el nitrógeno que les pueda faltar sus cultivos.
En los laboratorios se buscan a nivel molecular soluciones que ayuden a favorecer el proceso natural de fijación biológica y la reducción de la pérdida de nitrógeno. En esa búsqueda, el equipo de investigación BIO115 de la Universidad de Córdoba (UCO) se centra en un tipo muy concreto de plantas. Son las leguminosas ureídicas, es decir la judía común, la soja y el caupí (un tipo de frijol muy popular en América). 
En la evolución a lo largo de millones de años de estas plantas, podría estar el santo grial del mundo vegetal, según los investigadores. Este tipo de leguminosas usan rutas mucho más complejas para la gestión del nitrógeno que el resto plantas y que cualquier otro tipo de leguminosas, que, como ellas también son capaces de fijar y aprovechar el nitrógeno atmosférico para su desarrollo.
El secreto para metabolizar el nitrógeno
Su secreto son unas extrañas verrugas en sus raíces, unos nódulos en los que metabolizan el nitrógeno de una forma que no lo hace ninguna otra especie del reino vegetal. Producen grandes cantidades de compuestos orgánicos conocidos como purinas. Este proceso bioquímico que funciona a nivel basal en cualquier célula de casi todos los seres vivos, solo se activa para producir cantidades elevadas de purinas en otros dos procedimientos biológicos: el crecimiento de los embriones y de las células tumorales. 
La rareza ha despertado la curiosidad de la ciencia que intenta explicarse por qué la soja o las judías se han complicado la vida evolutivamente de esa manera, para acabar haciendo lo mismo que su “primo” el guisante, que incorpora el nitrógeno por una vía mucho más simple. Mientras encuentra la respuesta definitiva, intenta ir ofreciendo nuevos datos.
En un estudio publicado revista Plan, Cell & Environment, el equipo científico de la UCO describe cómo la expresión del gen PRAT3 en el nódulo de la judía común interviene y regula la síntesis de las purinas en los nódulos. La descripción no aporta la respuesta definitiva, pero permite seguir avanzando. “Hemos encontrado el gen, creemos que si aprendemos a controlarlo podremos conseguir que otras  plantas imiten a la soja o a la judía común y ayuden a conseguir un uso más eficiente del nitrógeno. Pero es solo nuestra hipótesis. Ahora toca ponerse a trabajar”, explica el director del grupo, Manuel Pineda.